El programa fue creado por Boeing en 2011 y desde entonces ha probado más de 50 tecnologías en tres modelos diferentes de aeronaves (Next Generation B737-800, B787 Dreamliner y un B757). 

En 2012, quince nuevas tecnologías se probaron en un avión de la American Airlines (Next Generation B737-800) como, por ejemplo, la celda de combustible de hidrógeno regenerativo y el biocombustible mezclado.
           
En 2014, fue el turno de probar veinticinco tecnologías para dejar los vuelos más silenciosos y más eficientes en términos de utilización del combustible. En ese sentido se probó por primera vez el "green diesel": el avión B787 Dreamliner voló con una mezcla de 15% de "green diesel" y un 85% de combustible fósil. El "green diesel" es un tipo de biocombustible obtenido a partir de una mezcla de sebo y varios tipos de aceite, incluso el de cocina, reciclado.
 
En 2015, Boeing invirtió aún más en la reducción de las emisiones de gas carbónico. Junto con la NASA, ecoDemonstrator utilizó por primera vez el "green diesel" producido en Estados Unidos (una mezcla con un 5% de "green diesel" y un 95% de combustible de crudo para chorros). Boeing afirmó que ha trabajado para aprobar el uso del "green diesel" en la aviación comercial, lo que haría el biocombustible más accesible para las compañías aéreas y estimularía aún más su uso.
 
Una de las principales innovaciones del EcoDemonstrator este año es la prueba de desempeño del biocombustible producido a partir de la caña de azúcar. Los estudios realizados por los equipos de Boeing y de Embraer apuntan que el bioqueroseno de aviación puede emitir del 50% al 80% menos carbono en su ciclo de vida que el queroseno de origen fósil. Esta es la primera vez que Embraer participa y promete contribuir bastante con las investigaciones que viene desarrollando desde el año pasado en el área de biocombustibles.
 
La empresa brasileña fue fundada en 1969 y es líder en la fabricación de jets comerciales de hasta 130 asientos. Por correo electrónico, la oficina de prensa de Embraer aclaró cómo se está desarrollando el trabajo en el Centro Conjunto de Investigaciones en Biocombustibles Sostenibles para la Aviación:
 
"El Centro Conjunto de Investigaciones en Biocombustibles Sostenibles para la Aviación, abierto el año pasado en el Parque Tecnológico de São José dos Campos en asociación con Boeing, fue creado con el objetivo de desarrollar y madurar conocimiento y tecnologías para posibilitar el establecimiento de una cadena volcada "tema en Brasil"
 
De acuerdo con Embraer, las pruebas con biocombustibles no se hacen allí, sino en el Laboratorio Nacional de Ciencia y Tecnología del Bioetanol (CTBE), en Campinas (SP). Durante siete meses, los investigadores van a evaluar el potencial técnico-económico de las biomasas, las tecnologías de conversión y el proceso de producción de biocombustibles a la aviación a través de una herramienta digital conocida como "Biorrefinaria Virtual de Caña de Azúcar".

"En la simulación, datos económicos, sociales y ambientales fueron utilizados para identificar los impactos técnicos y de sostenibilidad de las potenciales alternativas hoy maduras (y disponibles en Brasil) para producción de biocombustibles para aviación", explicó la asesoría de prensa de Embraer.

Fuera del laboratorio, el biocombustible producido a partir de la caña de azúcar va a ser probado en la aeronave Embraer E170 que forma parte del proyecto EcoDemonstrator de este año. Los ensayos están programados para suceder entre agosto y septiembre de este año.

Meta internacional de reducción de emisiones de CO2

El proyecto forma parte de la meta firmada por los países miembros de la Organización de la Aviación Civil Internacional de estabilizar las emisiones de gas carbónico para 2020 y reducirlas en un 50% para 2050. Actualmente, las emisiones de la aviación vienen creciendo de 2 a 3% al año .

La meta fue firmada en 2013 y desde entonces la industria de la aviación se ha esforzado por desarrollar combustibles alternativos más sostenibles. En diciembre de 2014, Boeing completó el primer vuelo con el llamado "green diesel" y actualmente existen al menos cinco tipos de combustibles diferentes que liberan menos gas carbónico en el aire (queroseno sintético con aromáticos, queroseno con parafina sintética, ácidos grasos y ésteres hidroprocesados, isoparafinas sintéticas y azúcar fermentado hidroprocesados, alcohol para jatinos con queroseno parafínico sintético).

Estos métodos han sido aprobados internacionalmente, permitiendo la conversión de una amplia gama de recursos renovables de biomasa en combustible sostenible para la aviación.